Movimiento Por La Educación Libre está integrado por un colectivo de padres y docentes radicados en Mar del Plata, Argentina, que, no habiendo encontrado respuestas en el sistema escolar tradicional (público y privado) a su interés y preocupación por la educación de sus hijos, buscan una alternativa pedagógica basada en el respeto, la libertad, la creación de valores positivos para la sociedad. Esta búsqueda tiene como objetivos la creación de un proyecto pedagógico basado en teorías y experiencias ya existentes, y la apertura de una escuela donde aplicar dicho proyecto, abierta a la comunidad.

lunes, 29 de julio de 2013

Escuela Cooperativa Amuyen

Origen

Origen
En junio de 1986 un grupo de docentes y padres se reúnen para pensar alternativas frente a la crisis educativa por la que atravesaba la ciudad de Mar del Plata. Es así como se gesta una escuela basada en la solidaridad y la igualdad, una escuela de todos en general y de nadie en particular, la Escuela Cooperativa Amuyen.​ Las respuestas a estas inquietudes con respecto a lo organizativo las encontraron en la autogestión basada en el cooperativismo y en lo pedagógico en la teoría psicogenética de Jean Piaget, implementada con la metodología de la Dra. Sara Paín a través del asesoramiento de la Lic. Marta Ricchini.
El 11 de Octubre de 1986 la unión voluntaria de 40 familias fundó la  Cooperativa “Tierra Nueva” y al año siguiente comenzó a funcionar la Escuela Amuyen. Así fue como el 16 de Marzo de 1987 quedó inaugurada la primera Escuela Cooperativa de Mar del Plata.
En sus inicios el ex Jardín de Infantes contaba con una sala integrada de 10 niños/as y la Escuela Primaria estaba divida en dos grupos de 22 estudiantes en el primer ciclo y 12 en el segundo ciclo.
En el año 1993 incorporamos  el Instituto de Estudios Secundarios que otorga el título de Bachiller en Humanidades y Ciencias Sociales con orientación en Cooperativismo.
Actualmente Amuyen en sus tres niveles de enseñanza (Inicial, Primario y Secundario) suma  más de 350 estudiantes.
A lo largo de su historia fueron muchos los asociados que dedicaron su tiempo y esfuerzo, traducido en trabajo concreto en los distintos organismos que forman la cooperativa. Siempre con la convicción profunda de que solo el compromiso y el trabajo conjunto permiten modificar la realidad.

Gestión Cooperativa

Gestión Cooperativa
El conjunto de ideales que implícita o explícitamente nos sustentaba en el momento fundacional, encontró en la organización cooperativa el mejor modo de constituir la escuela pensada. A partir de esta conformación inicial, la vivencia de la acción cooperativa nos llevó a que los principios del cooperativismo se transformaran en el eje del accionar institucional constituyéndose a partir de ese momento en el motor del proyecto. Imbuidos de esta filosofía intentamos propiciar en todos los ámbitos de nuestra institución las operaciones que nos permitieran un funcionamiento solidario, responsable, participativo y democrático.
La Cooperativa de Enseñanza Tierra Nueva es una cooperativa singular puesto que no se trata de una empresa de trabajo ni de lucro, sino de servicios de enseñanza cuyos asociados somos los padres de los estudiantes que cursan los distintos niveles. Los asociados nos reemplazamos permanentemente, ya que “egresamos” de la cooperativa cuando nuestros hijos lo hacen de la escuela.
Desde su fundación la Cooperativa ha tenido  un crecimiento y fortalecimiento institucional sostenido y esta es la garantía de que las ideas de nuestros precursores fueron buenas, que el proyecto funciona y la idea nos trasciende.
Nuestros valores
Adherimos como comunidad a los valores cooperativos de ayuda mutua, responsabilidad, democracia, igualdad, equidad y solidaridad.
Nuestros objetivos
Nuestra política institucional tiene dos objetivos principales:
-         Facilitar y coordinar una fluida comunicación entre los distintos actores de la comunidad educativa.
-         Favorecer la participación y la integración de la escuela con el entorno en el que se incluye.

En el aula

En el aula
Dentro de la Escuela Amuyen la formación cooperativa tiene un tratamiento teórico dentro de los planes de estudio y se aplica diariamente estimulando actitudes y hábitos de participación, responsabilidad y cooperación coincidentes con los principios básicos de la propuesta pedagógica constructivista.


Principios orientadores

Nos proponemos:
…formar hombres y mujeres, que sean capaces de hacer cosas nuevas, no simplemente retener lo que han hecho otras generaciones, que sean creativos, descubridores…
Jean Piaget
DSCI0380
Participación: Propiciamos un espacio donde los estudiantes, junto con sus pares, sean protagonistas y artesanos de su propia formación, siendo esto algo a conquistar a partir del desafío y el placer de aprender. La participación obliga a la tolerancia y para que sea útil proponemos que sea, a un mismo tiempo, un derecho pero también un deber creando las condiciones para que todos tengan un lugar de participación precisa. Todos los chicos deben hacer la experiencia, expresar opiniones, defender argumentos, informarse, encontrar documentos y soluciones. Favorecemos en las prácticas del aula la participación activa y el intercambio constante, donde la acción y reflexión se complementan.
 
Cooperación: La cooperación es indispensable para la construcción del conocimiento y el método de trabajo en grupo reúne las mejores condiciones para la socialización del conocimiento además de brindar la oportunidad de ejercitar la solidaridad y la convivencia. En las aulas de Amuyen el trabajo se realiza en mesas de trabajo grupales  de modo tal que cada estudiante tenga una responsabilidad y un modo de participación. Algunos útiles escolares pueden ser comunitarios y los chicos que mejor se desenvuelven en una actividad pueden ayudar a los otros a avanzar. Los grupos formados no son definitivos, podrán modificarse en función de la temática que se trate y, en algunos casos, los estudiantes podrán agruparse libremente. Las tareas asignadas refieren a situaciones problemáticas que el grupo como tal tendrá que resolver. La discusión, la necesidad de comprobación, la coherencia en la argumentación, conducirá a que cada integrante aprenda a pensar en función de una realidad común y que pueda colocarse en el punto de vista del otro. La puesta en común del trabajo realizado por cada grupo es  una instancia más para debatir hipótesis, reconocer errores y disminuir la confusión.
 
Responsabilidad: jóvenes archivo 5Nuestro empeño está puesto en interesar  a los chicos en aquellos temas que son importantes para la sociedad y el país, para que, más allá de la escuela y a través de toda su vida, sean hombres y mujeres responsables  capaces de insertarse creativamente en su comunidad.

Estimulamos  el desarrollo de la responsabilidad individual basándonos en tres principios fundamentales:
  1. Confianza, nadie puede sentirse responsable si se ejerce sobre él una continua vigilancia.
  2. Claridad en los límites de exigencia, nadie puede ser responsable de un trabajo del cual no posee todos los resortes.
  3. Autonomía de acción y auto-valoración de los resultados, los estudiantes pueden mediante un proceso de experimentación indagatoria, identificar diferentes alternativas para resolver un determinado problema. Cada conocimiento se convierte así en una conquista, en una aventura. Auto-evaluación y co-evaluación son formas integradas en el proceso de aprendizaje.

jueves, 25 de julio de 2013

Instituto de Educación Superior "Roberto Themis Speroni"

   El Instituto de Educación Superior "Roberto Themis Speroni" es una institución pública de gestión estatal. Es una unidad académica, ya que abarca desde el nivel Inicial hasta dos carreras de profesorado de Magisterio.
   Tiene su origen en el Centro Pedagógico de La Plata, el cual inicia sus actividades en el año 1958 de la mano de las docentes Nelly Pearson, Marta Burnichon y Dorothy Ling, en la calle 511 esq 20 (en la actualidad funciona como Jardín Maternal y Centro Cultural). En el año 1984 el Gobierno Nacional invitó a los docentes del Centro pedagógico a formar el grupo inicial del I.E.S. R.T. Speroni, el que a su vez, y hasta la fecha, ha generado 15 emprendimientos educativos en todo el país (desde la provincia de Córdoba hasta la de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur) . Todos estos emprendimientos siempre se originaron por el decidido interés de las distintas comunidades por contar con una escuela con la singular propuesta que lleva adelante el I.E.S. R.T. Speroni.
   Como un particular vínculo con la comunidad, el Instituto cuenta con un conjunto de música y teatro denominado "Los Fresnos", que periódicamente realiza conciertos y funciones de teatro de títeres abiertas al público, en las distintas escuelas anexas del Instituto.
  El Instituto funcionó durante sus 10 primeros años de vida en edificios alquilados (en calle 13 y luego en barrio Nirvana), y desde el año 1994 ocupa su actual sede sobre el Camino Belgrano, de la localidad de City Bell, La Plata.
   El que sigue es un texto escrito por autoridades del Instituto en el que cuentan su experiencia:



                            BREVE SEMBLANZA DE UNA EXPERIENCIA EDUCATIVA


Nos toca como maestros del Instituto de Educación Superior "Roberto Themis Speroni" (Institución Pública de Gestión Estatal. Inicial. Primario. Secundario. Terciario. Unidad Educativa. Provincia de Buenos Aires, República Argentina), la difícil tarea de presentar nuestra Escuela en unas pocas líneas. Tarea difícil porque el modo de llevar a cabo nuestra labor tiene como fundamento -no siendo una escuela de arte- la tarea artística, y sabido es que el arte no es algo que se pueda expresar con palabras en su sentido literal.

La propuesta pedagógica que presentamos comenzó en el año 1958 con tres maestras y en la casa de una de ellas. Los alumnos fueron los chicos del barrio y el trabajo de esos años, plenos de descubrimientos, constituyeron los pilares de la tarea . Su marco legal fue una Asociación Civil sin fines de lucro que se denominó Centro Pedagógico de La Plata y estuvo a cargo de personas hondamente preocupadas por el rumbo de la educación. Fue creciendo, principalmente en número, ya que el modo de "echar a andar" la Escuela todos los días, no ha variado desde entonces en su sentido profundo; sí han cambiado aspectos vinculados al trabajo cotidiano, pero no, repetimos, la esencia.

Por el año 1984, el Estado Nacional Argentino, interiorizado de la tarea y profundamente interesado en ésta, invitó a quienes propiciaban entonces el trabajo, a incorporarse a la órbita del Ministerio de Educación de la Nación. De este modo, y con el absoluto respeto por la propuesta educativa, nuestra Escuela comenzó a ser parte de la enseñanza oficial de nuestro país, es decir, Escuela Pública de Gestión Estatal, y se caracterizó como una Unidad Educativa, con los niveles inicial, primario, secundario y terciario. El nivel terciario, con sus dos carreras de magisterio, formaría los maestros que luego trabajarían en las escuelas que se fueran generando. A partir de ese año la Unidad Educativa fue denominada como Instituto de Educación Superior “Roberto Themis Speroni”.

Más tarde, en el año 1994, la Institución fue transferida, como todas las Escuelas Nacionales, a la provincia de Buenos Aires, donde está situado el Establecimiento.

El paso de los años hizo que algunos grupos de padres de comunidades de otras provincias, preocupados por la educación de sus hijos, se acercaran al IES “R.T.Speroni” para ver la posibilidad de crear una escuela en sus pueblos o ciudades. Así, estableciendo contactos con los gobiernos provinciales y/o municipales se han generado, Centros Educativos en todo el país y en New Jersey, Estados Unidos de Norteamérica (se adjunta al respecto información anexa). El marco legal referencial de creación, en la mayoría de los casos, fue por convenio. Estas escuelas no solamente están sostenidas por los maestros egresados del I.E.S. "R. T. Speroni", sino también por docentes y/o profesionales de otros ámbitos, los que pueden incorporarse a la planta funcional mediante un previo sistema de adscripción.


Como decíamos al comienzo, difícil es poner en palabras el trabajo que desarrollamos en nuestra Escuela por la índole del trabajo mismo y, también, por su carácter de “experiencia”, aspecto este que significa que nunca la teoría se antepone a la práctica. No es posible enmarcar nuestra experiencia pedagógica en alguna teoría de la educación debido a que su misma génesis no está determinada por ninguna teoría particular, ya que a nuestro entender, constituiría una primera delimitación y coto a la libertad que la nutre, una de sus características esenciales.

A nuestras escuelas las constituyen alumnos y maestros; no hay otro personal además del docente; esto significa que toda tarea necesaria para la marcha de la Escuela es hecha o bien por un maestro o bien por un alumno. El trabajo que se realiza es posible porque se lleva a cabo en pequeña escala; nuestras escuelas son relativamente chicas; ingresan sólo alrededor de veinticinco alumnos por año, por lo cual una planta funcional formada por un maestro por grupo de niños y un director , es suficiente (cabe aclarar que en los niveles Secundario y Terciario están también los docentes de área).

La pintura, la poesía, la música, la danza y el teatro, como distintas manifestaciones del arte y de la capacidad creadora del hombre, están presentes diariamente en la Escuela, y, más aún, son el sostén de todo el trabajo que maestros y chicos realizan. Dentro de este contexto se desarrollan las áreas curriculares.
En el arte y no en la técnica está el trabajo del mismo modo que lo encontramos en el camino, en el proceso y no en el resultado. La actitud de los más pequeños es la que nos guía en este sentido: una total entrega en la realización de una pintura, por ejemplo, y un caso más o menos omiso cuando la misma se halla terminada. Los alumnos un poco más grandes pueden “preparar” durante un tiempo extenso una obra de teatro, obra que representarán tal vez sólo una vez. Algunos adultos –ajenos a la Escuela- suelen comentar que es una lástima tanto trabajo para una sola representación. Tales consideraciones muestran a las claras que no han comprendido que ese tiempo de “preparación” es, en realidad, tan “obra de teatro” como el momento de la representación ante el público. Esto es lo que los alumnos saben desde el momento que ingresan a la Escuela: lo que vale la pena es el trabajo, lo que se hace momento a momento y el resultado se valora como una parte más de ese trabajo.

Del mismo modo, no se plantea a los chicos la idea de que van a aprender algo en determinado momento. La propuesta del maestro es siempre la de hacer algo: cantar, bailar, leer, hacer matemáticas, etc.. Es justamente en el transcurso de ese hacer, que el aprendizaje se realiza pues todo en la Escuela tiene que ver con la experiencia.

¿Cómo puede ser posible que los niños aprendan a leer si nadie les enseña? Aprenden a leer por el interés que les despierta la palabra escrita. Aprenden a leer porque leen desde el comienzo carteles con sus nombres, con nombres de animales, con poesías, etc.. Aprenden a leer porque hacen juegos con palabras escritas. Todo esto desde que ingresan a la Escuela a los tres años; cada uno lee a su tiempo; ninguno de los chicos se verá apurado por el maestro para que lea, ya que leer debe ser algo deseado por el niño y no, impuesto por el adulto.

Así se aprende todo en la Escuela. Las Matemáticas, contando desde pequeños, sumando, restando, resolviendo problemas de ingenio. La Historia, escuchando relatos mitológicos y vida y costumbres del pasado. La Geografía, mirando y dibujando mapas, etc.

El material con el cual se trabaja es algo siempre muy cuidado. Las versiones de cuentos o novelas son siempre originales y nunca adaptadas; si se trata de ver fotografías, han de ser de máxima calidad, al igual que los elementos de pintura (óleos, témpera, pinceles, fibras). Los maestros no utilizan para el trabajo el material que es diseñado especialmente para niños, ya que éstos, generalmente, no consideran al niño como un ser capaz de interesarse vivamente por distintos temas más allá de que pueda o no entender algún vocabulario específico; lo que interesa en estos casos es que puedan los chicos captar el sentido general de las cosas y, si algo quedó sin aclararse totalmente, será lo que lo impulse a seguir escuchando o investigando sobre el tema.

La jornada tiene, como última actividad, el canto y la danza que se realizan en una gran rueda de la que participan todos los chicos y maestros. Es en esa ocasión en la que se convidan las galletas o el pan que se hicieron en la Escuela.

Ya sin alumnos, los maestros comparten un té o un almuerzo durante el cual intercambian opiniones y conversan acerca de los chicos, del trabajo en general o particular, en fin, de todos aquellos temas que la marcha de la Escuela requiera. Es en estos momentos en los que se realiza la evaluación, que siempre es conjunta y global y se registra en un cuaderno; no existen las calificaciones ni los boletines. Cuando los maestros o los padres tienen algo para decirse, se concierta una entrevista y, en ese marco, se conversa aquello que es necesario o se cree conveniente. Con las naturales variantes, en forma análoga se desarrollan los días en los niveles secundario y terciario.

Teniendo en cuenta lo expresado, nos importa señalar lo siguiente: a) La Escuela, en todos sus niveles, desarrolla los programas oficiales y sobre esos programas oficiales se articulan las características que venimos de señalar. b) Las cuestiones disciplinarias no se resuelven con las llamadas “amonestaciones” sino que lo que se intenta es una serena convivencia con pautas claras, pautas que en primer término son para los maestros y de allí la comprensión y el respeto que los alumnos despliegan frente a situaciones críticas. c) La jornada laboral es más amplia que la exigida oficialmente puesto que así lo requiere la tarea que se desarrolla. d) Intensa participación de la Comunidad Educativa dentro de la Escuela. e) El grupo de maestros y los alumnos prestan diversos servicios a la comunidad: en el barrio, en los hospitales, en los asilos de chicos huérfanos, en las escuelas de la zona llevando música, teatro, talleres de distintas ciencias y en general aportando material confeccionado por los alumnos y maestros. También se proyectan películas con un equipo de cine portátil. f) Respuesta inmediata a las invitaciones para recorrer nuestra propuesta pedagógica ante los foros nacionales e internacionales. g) Nuestra Escuela es internamente no graduada. Esto nos permite consustanciarnos con los distintos “tiempos” de cada chico y así entonces no se alienta lo que se conoce como “progreso” sino que se intenta recuperar la alegría del trabajo por el trabajo mismo.





Son hábitos cotidianos, simples, pero que adquieren tal significado que los hace sentir como “en casa” y revalorizar cada cosa

Es importante resaltar que para comprender y vivenciar profundamente la tarea diaria, los maestros, en general, han participado de un magisterio de cuatro años donde se recorre el mismo camino que emprenderán los chicos.

Este camino no tiene final, ya que es un constante trabajo con uno mismo, que propicia la recreación de la propuesta educativa desarrollada.


                                                                                                                                   

lunes, 22 de julio de 2013


La pedagogía Montessori, un mundo que se abre para el desarrollo infantil

Promueve la autonomía en el aprendizaje; los chicos hacen trabajos diferentes en la misma aula.

Lo primero que llama la atención al entrar en el jardín de infantes Olivos Montessori School es el silencio que reina y la armonía que se percibe en las salas, a pesar de que cada uno de los 24 chiquitos está haciendo una actividad diferente con la maestra que los va guiando.
No hay peleas ni gritos ni una profesora que hable fuerte. Federico, de dos años, desenrolla una alfombrita azul y la despliega en un costado de la sala; toma de los estantes unos bloques de madera celestes de diferentes tamaños y se dispone a trabajar sobre su alfombra, ubicando de mayor a menor la serie de bloques. Al cabo de minutos se levanta, guarda el material prolijamente en un estante, enrolla la alfombra y toma un rompecabezas de madera, que en rigor es un mapa del continente africano.
En otros rincones se suceden distintas actividades. Los chicos conversan y se ríen. "En nuestro colegio los chicos aprenden haciendo, tocando, oliendo, sintiendo. Experimentan todo", explicó Valerie Cavallo, una de sus dueñas.
Esta tradicional escuela de Olivos es una de las tres del país que utilizan la pedagogía Montessori, un método no convencional de enseñanza creado por la médica italiana María Montessori hace 100 años, cuyo objetivo es inculcar en los chicos la autonomía, la independencia para elegir qué hacer y cómo aprender, la iniciativa y la curiosidad, el amor por el orden, la concentración, la autodisciplina y el autoconocimiento.

LLEGAR A TODOS

La pedagogía Montessori está ampliamente difundida por el mundo, con más de 20.000 colegios en 110 países. Pero su desarrollo en la Argentina aún es incipiente. Existen sólo tres jardines de infantes que imparten esta pedagogía: el de Olivos, el Jardín Montessori de Luján y la escuela rural N° 711 Manuel Alberti, en Santa Fe.
El desafío de sus impulsores es llevar esta experiencia a las escuelas estatales para que no quede limitada a la enseñanza privada o a poblaciones de elite.
"Hubo algunas otras escuelas en el norte del Gran Buenos Aires que no funcionaron porque no fueron fieles a la filosofía de su fundadora", comentó a LA NACION Marisa Canova, presidenta de la Fundación Argentina María Montessori, una de las dos entidades argentinas que divulgan la filosofía de la médica italiana.
Durante este año, en el que el movimiento celebra su centenario, la fundación prepara la creación de un centro de entrenamiento de guías Montessori en la Argentina, en sintonía con la Asociación Montessori Internacional (AMI).
Para María Becerra, apoderada de la Asociación Montessori Argentina, la otra entidad que trabaja en Buenos Aires, el movimiento montessoriano no se afianzó en la Argentina por el peso de la educación tradicional. "Nunca nos caracterizamos por ser una sociedad independiente y libre, principios que están en la base de esta filosofía", dijo.
Explicó que el movimiento penetró en el país entre 1911 y 1926, con la acción de las hermanas Olga y Leticia Cossettini, referentes de la llamada Escuela Activa. El Consejo Nacional de Educación y algunas provincias intentaron extenderla, pero todo se frenó durante el gobierno de Perón, en 1950. "Luego, con los regímenes dictatoriales, fue imposible educar con este espíritu", agregó.
La pedagogía Montessori se basa en ciertos presupuestos. Sostiene que el niño tiene al nacer una motivación innata de aprender y las cualidades para hacerlo por sí solo. Por lo tanto, lo mejor que los adultos podemos hacer por él es darle las oportunidades y un adecuado ambiente para que despliegue su potencial natural.
Según un estudio realizado por la revista Science en septiembre de 2006 en EE.UU. (donde existen 5000 establecimientos que imparten esta enseñanza), los pequeños que asisten a estos jardines de infantes demostraron mejores habilidades en lectoescritura y matemática que aquellos que estudian en colegios tradicionales. También obtuvieron mejor desempeño cuando se midió su capacidad de adaptación a los cambios y la capacidad de resolución de complejos problemas.
"El niño es su propio maestro. Elige qué hacer en clase y cuánto tiempo dedicarle a cada actividad. Fomentamos su autonomía e independencia. Esta actitud lo ayudará en el futuro a saber cómo resolver problemas y vencer obstáculos. Es una educación para la vida", comentó Marisa Canova. Los adultos son sólo guías. El protagonismo y la responsabilidad en el aprendizaje son del chico.

MENTE ABSORBENTE

La pedagogía nació para la etapa de jardín de infantes. La doctora Montessori observó a los niños de 0 a 6 años y concluyó que durante este período el niño es una esponja con un potencial de crecimiento que no volverá a tener en toda su vida.
"Por eso es vital darle las mejores oportunidades de aprendizaje. En los tres primeros años el bebe tiene una mente absorbente; chupa todo como una esponja. Las experiencias de esta etapa lo marcarán el resto de su vida. Es central que absorba el agua limpia y transparente y no turbia. Este es el momento crucial donde mejor y más naturalmente internaliza las normas sociales, morales, culturales, aprende el lenguaje y el movimiento", explicó Zarin Malva, directora del centro de entrenamiento docente Montessori en Mumbai, India.
Malva estuvo esta semana en la Argentina invitada por la Fundación Argentina María Montessori, para dictar conferencias en la Universidad Austral y la Universidad Católica Argentina sobre este enfoque alternativo de desarrollo.
En diálogo con LA NACION, explicó que "lo maravilloso de este método es que es simple y alegra la vida a los chicos y a los docentes, a quienes no se los recarga con trabajo inútil".
El abordaje es holístico (toma en cuenta todas las dimensiones de la persona y su ubicación en el universo como un todo único), humanista (respeta la individualidad de cada niño, su propio camino de aprendizaje, sus elecciones, sus intereses, sus tiempos personales y ritmos), práctico (el proceso es activo y no pasivo) y sensorial (promueve el aprendizaje a través de todos los sentidos).
Con la consigna learning by doing (aprender haciendo), el niño en clase mete mano a todo. "Si oigo, olvido. Si oigo y veo, recuerdo. Si oigo, veo y hago, aprendo", explicó la fundadora del movimiento.
"No tenemos duda de los beneficios. Si al chico se le dan las oportunidades, en el momento preciso, con la ayuda de materiales adecuados, el resultado será un excelente aprendizaje", insistió Malva, convencida de que la metodología es resistida porque "a nadie le gusta escuchar que lo que viene haciendo por años no es lo mejor".
"Hoy -advierte- existe una mecanización en la forma de enseñar en los colegios, mucha repetición y poca observación directa del niño", dijo.

QUÉ ES LA FILOSOFÍA MONTESSORi 

ORIGEN

  • Esta pedagogía fue creada por la educadora María Montessori, la primera médica italiana.

CARACTERÍSTICAS

  • Promueve el desarrollo de la autonomía e independencia del niño, el aprendizaje a través de la experiencia, la autodisciplina y el autoconocimiento.

ALCANCE MUNDIAL

  • Expandida en 22.000 escuelas en todo el mundo, en la Argentina hay sólo tres jardines de infantes.
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